Itzultzeko eskubidea
Nerea Arrien Elordi
fabula Badalab Laboratorio de Innovación Lingüística
Ilustraciones: Izan Sampedro Ladislao
#10. Julio 2023
Desde que la crisis climática dejó al mundo a merced de la soberbia de la altura de las mareas, la vida se desarrolla bajo el temor a las inundaciones y a merced de las protecciones verticales. Criaturas que son mitad hombres, mitad computadores, simios o avatares suben y bajan huyendo de la naturaleza que exige las agallas de los peces.
El mundo es una zona pantanosa, en todos los sentidos. Mitad tierra, mitad agua.
Jóvenes, descontentos, deteriorados, disminuidos… han tomado lo que les pertenece; la cruda calle. Zona cero. Losa. Una acera de verdad. Han organizado una revuelta horizontal expresándose en una lengua que sabe mucho del rechazo. El euskera se ha hecho mainstreaming en la ciudad Obabel de territorio vertical, porque un cuerpo no puede soportar tantas hibridaciones; mitad robot mitad humano, hija de una madre que está y no está fifty-fifty, que piensa en una lengua y los traductores la expresan en otra.
Hoy en día, nos resulta extraño, pero hubo una época en la que el cerebro tenía una relación directa con las emociones. ¿Existirá derecho de revuelta?